Fortunata y Jacinta
La mejor novela que se ha escrito en castellano desde El Quijote es esta voluminosa obra de Benito Pérez Galdós. De asunto costumbrista, madrileño, de mediados del XIX. Recorre las vidas paralelas, pero muy diferentes en fortuna de dos mujeres madrileñas, las del título, y sus relaciones con sus respectivos maridos y familias. Las historias son narradas en paralelo, pero a veces, en momentos cumbre de asombrosa habilidad narrativa y de interés para el lector, estos personajes se entrecruzan, se encuentran y conversan, de forma que el contraste de vivencias, de fortunas, se hace más palpable, pues ellas mismas son testigos, como nosotros, de sus dispares situaciones. Estas situaciones son de lo más típico, y más en la sociedad de aquella época. La una es rica, y está destinada a formar una familia “decente”, de clase alta, que guarde las apariencias y formalidades exigidas a las personas de su elevada posición; la otra no tiene nada, pero tiene una belleza que atrae al hombre que será marido de la otra y de quien ella también se enamora. Y ya se sabe la historia. Parece un folletín, pero no es nada de eso. Los vericuetos de la historia son profundos y muy interesantes, las vicisituddes de ambas mujeres y sus parejas son infinidad, y todas descritas con un talento excepcional, con mucho realismo y precisión de lenguaje. A pesar de lo largo de la obra, ésta no posee ni una palabra de más ni de menos, ni divaga ni se distrae de la trama, ni entra en filosofías, ni circunloquios. Es pura narrativa condensada hasta el punto de transmitir al lector lo máximo posible de las vidas de estas dos mujeres. Que se olviden los aficionados a la literatura de buscar motivos y asuntos, de querer leer las posibles intenciones de crítica social del autor. No. Galdós está por encima de todo eso. Galdós es el arte de escribir a la perfección, de saber contar historias, de saber encontrar el alma de los personajes, y de elevarlos por encima de su condición social a los ojos del lector, de reflejar la vida, muy intensa, que hay en ellos, cualquiera que sea su posición en la sociedad que les ha tocado vivir. Fortunata y Jacinta es la vida de dos mujeres jóvenes, similares en edad, pero muy distintas en cuanto a la fortuna que les ha tocado vivir, y que comparten un ambiente social que es la ciudad de Madrid, y cuyos destinos se cruzan... pero de eso, mejor leerlo. Libros como El Quijote o como Fortunata y Jacinta, hasta parece de mal gusto ponerse a analizarlos; debería de bastar recomendarlos simplemente porque se leen tan bien, están -en definitiva tan magistralmente escritos- con tal dominio del idioma, haciendo fácil lo que es tan difícil de contar, de describir, que esto debiera bastar.
Recomendable comprar en la edición más cara posible, de tapa dura, y para conservar bien visible, y en un lugar de honor, de nuestra estantería. Yo lo leí en una edición de Biblioteca de Castro de la biblioteca municipal, un tomo macizo como un lingote de oro, pero no lo encuentro ya a la venta.